sábado, 17 de octubre de 2009

sudor

nuestros ojos vuelven a cruzarse...


me acerco a ella manteniendo firme la mirada y extiendo mi mano...

la toma sin vacilar, sabe lo que busco y ella también lo quiere...

al principio nos deleitamos despacio...

tranquilos...

sabedores de lo que viene a continuación...

ella se deja hacer...

se abandona disfrutando del goce de un momento compartido...

el ritmo se intensifica...

gotas de sudor perlan nuestras cálidas pieles cuan tempranas gotas de rocío...

el final esta cerca...

me paro...

pongo sus manos alrededor de mi cuello...

y la tumbo...

entonces ambos salimos, buscando un poco de descanso, o quizá la próxima pareja...

alguna voluntaria para bailar la próxima pieza de salsa? :P

o que pensabais?

^_^

sábado, 12 de septiembre de 2009

hay dos tipos de personas dependiendo de su actitud con respecto a la vida...

unos, viven muriendo...

otros, mueren viviendo...

tu donde andas?

miércoles, 9 de septiembre de 2009

temblad mortales...

temblad...

cuando salgáis a la calle mirad bien a izquierda y derecha...

tened mucho cuidado y precaución...

porque hoy he aprobado el práctico del carnet de conducir...

el 9 del 9 del 9...

no te digo na y de lo digo to ^_^

muahahahahahaha

a todo esto, me se de alguien que se tiene que aprobar unas oposiciones :P

sábado, 29 de agosto de 2009

dicen que del amor al odio solo hay un paso...

¿bailamos?

lunes, 13 de julio de 2009

quien me ha visto...

... y quien me ve

y es que de un tiempo a esta parte algunas cosas se han colado nuevas por aquí... y para muestra un botón.

antes una ducha después de salir a correr era eso... una ducha... pero ahora se ha convertido casí en un ritual de relax...

por h o por b, por e o por c, ahora pongo música relajante... enciendo una vela... pongo incienso... y me paro debajo de la ducha hasta que el agua caliente se termina haciendo que las pulsaciones bajen y que el estress desaparezca... y luego un poco de aceite corporal para mantener la piel hidratada

sea como fuere tengo velas de unos siete colores distintos, incluso algunas de ellas perfumadas, que si fresa, que si vainilla... y unos cinco tipos distintos de incienso...

en fin... será cosa de hacerse mayor ^_^

sábado, 11 de julio de 2009

pisando fuerte

el otro día leo en el facebook una de esas frases con fundamento:

tengo los píes en la tierra
aunque pise barro y mierda


miércoles, 1 de julio de 2009

sonrisas




II - 29/06/2009

14-2-3
18-1-2

2-1-7
22-3-1
7-2-17
20-1-2
6-2-3
1-3-1

18-2-6
3-3-6

10-1-1
1-1-10
22-2-4
4-3-4

12-1-3
19-2-5

7-3-1
23-1-2
10-4-1
8-1-4
24-2-6
9-2-13
2-2-6
19-1-1

lunes, 29 de junio de 2009

madre tierra



I - 26/06/2009

miércoles, 17 de junio de 2009

hakuna matata

vamos, todos juntos, lo más facil es decir hakuna matata :-P




y a disfrutar de la vida ;-)

miércoles, 13 de mayo de 2009

aborto

me han pasado el enlace a un video

como podeis imaginar va sobre el aborto

pinchad en la opción "español video"

advertiros que las imagenes que en el se muestran son muy fuertes, y realmente te pueden llegar a dejar tocado...

no voy a añadir nada... no es necesario

miércoles, 25 de marzo de 2009

39

son los grados de temperatura con los que anoche me metí en la cama...

las cosas que tienen que algunos compañeros de trabajo estén enfermos y se traigan los virus para compartirlos con el resto...

comprobé que es imposible dormirse con tanta fiebre, los pensamientos van y vienen, en un momento me vi obligado a concentrarme en contar los dedos de mis manos, no quería que esos pensamientos se quedases como recuerdos y no ser capaz de distinguir si son reales o imaginarios

en fin, con el cansancio que llevo encima es hora de aviarse un poco e irse al trabajo... a ver como va hoy... de momento no tengo fiebre, pero me temo que volverá


domingo, 8 de marzo de 2009

por ti mujer


que tanto sufres y te preocupas
que tanto sientes y padeces
que tanto lloras y lamentas
que tanto quieres y das

porque te escuchen, entiendan y comprendan
porque te quieran, cuiden y protejan
porque te alienten, ayuden y acompañen
porque te recuerden, piensen y recen

ojala y sean todos los días del año como hoy
ojala llegue el día en que esta fecha desaparezca
porque si hiciésemos por ti mujer todo lo que mereces cada día
no sería necesario conmemorar por ti un día como este

por ti mujer
por todas las mujeres
que han sido, son y serán

gracias mujer

lunes, 26 de enero de 2009

Jonathan Crane (III)

hace tiempo publiqué los primeros capítulos escritos a partir de una partida de rol jugada hace años... es hora de volver a sacarlos a la luz y continuar con la serie

en capítulos anteriores...

Jonathan Crane (I)
Jonathan Crane (II)


_______________________________

Jonathan Crane

 

Una noche de “descanso”.

 

            A parte del grupo al completo, algunos hombres de seguridad y yo, nos acompañaron varias señoritas de las que habían pasado a pedir autógrafos. Al parecer las grandes estrellas eligen algunas de entre sus fans para “conocerlas mejor”. Nick no había dado todavía ningún concierto, aun así ya era famoso, y eso provocaba que tuviese seguidoras capaces de hacer cualquier cosa por él. Y alguna de esas seguidoras había tenido la suerte de poder acompañar a Nick hasta el hotel.

            De lo que sucediese en la habitación no fui testigo, y tampoco tengo ningún interés en serlo, es mas, no quiero serlo. Después de unas horas Nick salió de la habitación. Los de seguridad se encargaron de las chicas, y yo me fui con Nick, al parecer le apetecía tomar un poco el aire.

            Se puso al volante de un Porche, de momento no le había visto conducir así que no me negué a ello. Estábamos en Los Angeles y a Nick se le ocurrió que podíamos pasarnos a dar una vuelta por San Francisco. Ya en la vía principal pude observar que lo que quería era un poco de adrenalina, pues la velocidad que mantenía no era precisamente la reglamentaria.

            Me asuste un poco, he de reconocerlo. Un accidente a esa velocidad no le dejaría bien parado, y lo único que podía hacer yo en ese momento es esperar que no sucediese ningún incidente.

            Al cabo de unos minutos nos detuvimos en una estación de servicio, y me dijo que iba a comprar bebida. No es mi trabajo controlar que es lo que toma o deja de tomar, pero lo que si me interesa es que siga vivo, por lo menos unos años más. Le acompañe hasta la tienda. Pidió una botella de whisky y unas cervezas. Yo no acostumbro a beber y no iba a empezar a hacerlo esa noche, además tenia que tener todos mis sentidos perfectamente despejados.

Uno de los dependientes de la caja le reconoció y nos hizo estar esperando hasta que salió de la trastienda con el CD de Nick para que se lo firmase. Después de las muestras de agradecimiento del individuo y de haber pagado las bebidas nos dirigimos otra vez al coche.

            Ahora si que no estaba dispuesto a dejarle que tomase el control del vehículo, por lo que podía adivinar estaba dispuesto a beberse toda la bebida que llevaba y en ese estado si que es peligroso conducir, y mas si se trata de un coche potente. Le dije que me diese las llaves, conduciría yo, cosa que no le sentó muy bien, porque al parecer le estaba chafando la fiesta. Cuando tendí la mano para que me diese las llaves del coche, lo que hizo fue arrojarlas por detrás de mí. Estupendo, parece que al muchacho le apetecía jugar un poco conmigo. Me volví para ver donde habían ido a parar, pero no pude localizarlas. Era de noche y cayeron debajo de un camión.

            Deje a Nick apoyado en el coche, y me fui hasta la tienda para pedirles una linterna. Le pedí a uno de los dependientes que me dejase una linterna. Poco después apareció y me dijo que no tenían ninguna. Podría haber comprado una, pero estaba por allí un coche de policía y me dirigí a ellos. Les pedí ayuda, necesitábamos una linterna.

            Cuando llegamos hasta Nick este ya había dado buena cuenta de parte del whisky. El agente me dejo una de sus linternas y mire debajo del camión, pero no vi nada. Podría jurar que las llaves cayeron por esa zona, pero no estaban. Empecé a sospechar que Nick ya tendría las llaves, mientras trataba de buscar una linterna había tenia tiempo de recogerlas el mismo. Una vez echamos un vistazo a toda la zona le di las gracias al agente por la ayuda prestada y les dije que llamaríamos un taxi para regresar a Los Angeles. Pero Nick no me dejo terminar. Tomo una de las linternas y dijo que no habíamos buscado bien. Se acerco a una alcantarilla que había cerca, y como yo suponía, no tubo mas que agacharse para decir que había encontrado las llaves.

            Abrió el coche y se puso al volante. Los agentes de policía todavía no se habían ido, y se fijaron en el estado en el que iba Nick. Había bebido bastante y comenzaba a hacerle efecto. Yo no iba a dejar que conduciese en ese estado, pero no pude evitar que entrase el primero en el coche. El agente le pidió la documentación del coche. Nick la busco en la guantera, y el agente se fijo en el arma que había junto a los documentos, a lo cual respondió desenfundando y encañonando a Nick. Lo que iba a ser una pequeña escapada se estaba complicando por momentos, cualquier estupidez y todo seria un desastre, trate de conservar la calma.

            El policía hizo salir del coche a Nick y lo cacheo. Le hizo pasar la prueba del alcohol. Y mientras esto sucedía Nick no dejaba de hablar y de decir estupideces, cosa que no hacia mas que empeorar el asunto. Al final el agente concluyo en detenerle y llevarle a comisaria para que se le pasase la tontería. Intente evitarlo, le dije que yo era su guardaespaldas, que había tenido un día ajetreado, que se encontraba cansado, y que yo me encargaría de el. Pero no funciono. El policía me pidió que le entregase mi arma, y accedí. Suerte que no me registraron, habrían encontrado EL cuchillo.

 

            En la comisaria todo tipo de escoria. Prostitutas, pandilleros, drogadictos, y un largo etcétera de personas dejadas de la mano de la sociedad que se apiñaban en las dependencias policiales. Ahora estábamos sentados. Nick tenia a su izquierda a un grupo de cinco hispanos, y a su derecha me tenia a mí. Por el momento la cosa parecía tranquila, pero pude escuchar como Nick y el hispano que tenia mas cerca comenzaban a hablar. Como Nick no había tenido bastante comenzó a incordiar al personal, así que me levante y le hice a Nick que se sentase donde estaba yo. Ahora me encontraba entre el hispano y Nick, podría evitar que le hiciese algo. No sirvió para mucho, pues el hispano comenzó a hablarme a mí. Acepto que se me diga cualquier cosa, que se me insulte, incluso que se me pegue, siempre y cuando venga de Nick, pero ahora era a mí a quien estaba tocando las narices, y comenzamos a intercambiar algunas que otras palabras.

            Poco después la conversación cambio de aires, y fue necesario el ponerse de pie. El hispano tenia intención de propinarle a Nick un golpe con las esposas. Me interpuse entre ellos e intente evitar que le diese, pero no lo conseguí, con lo que le provoco un pequeño corte en el labio. Si hubiésemos estado en la calle le habría cortado la garganta, pero no me pareció buena idea sacar EL cuchillo en la comisaria y ventilarme al hispano. Lo que hice fue coger a Nick y llevármelo hasta otro sitio.

            Uno de los policías vio lo que sucedió y se dirigió al hispano, que al parecer se llamaba Martínez. Después de eso vino hacia nosotros y pregunto si nos encontrábamos bien, asentimos. Nick le pidió permiso para ir al servicio, el policía parecía un poco reacio, pero le dije que yo le acompañaría, que volveríamos en un momento y accedió.

            Ya en el servicio le devolví a Nick una pastilla que le había quitado antes en el coche patrulla. Cuando nos metieron en el coche, vi como Nick estaba tratando de tomarse una pastilla, lo que nos faltaba en ese momento es que le pillasen tomando pastillas, así que le impedí que la tomase y la guarde. Me dijo que era su medicación, que las necesitaba, pero aun así no creí conveniente que se la tomase en el coche. Pensé que podría tratarse de alguna droga o algo así, pero si en verdad se trataba de medicación le estaba privando de ella. No sé que enfermedad padecerá, pues no me lo dijo, pero no creí correcto no dársela. Si le sucediese algo por no tomarla no quería ser yo el responsable de ello. Así que ya en los servicios de comisaria se la di, y se la tomo.

 

            Estábamos de vuelta, y antes de soltarnos a nosotros, dejaron en libertad a los hispanos. Mientras salían volvimos a saludarnos, nos dijeron que nos esperarían fuera, al parecer esta noche haría un poco de ejercicio.

            Me dijeron que dentro de una semana volviese a por las pistolas, que quedaban decomisadas. No me importo mucho, aun conservaba EL cuchillo.

           

            Ya en el exterior de la comisaria nos dirigíamos a coger un taxi que nos llevara hasta el hotel, cuando vimos aparecer al grupo de hispanos que se dirigía hacia nosotros. No les importaba mucho que nos encontrásemos enfrente de la comisaria. Puse a Nick junto a la pared y me sitúe delante de el, mientras que los hispanos nos hicieron un semicírculo alrededor nuestro.

            Tenia aferrado EL cuchillo con fuerza, por detrás de la espalda, para que entrase en acción en cualquier momento. Martínez intento acercarse a Nick, pero me interpuse entre ellos. Les dije que no queríamos problemas, solo queríamos tomar un taxi y salir de allí. Martínez nos pidió que dijésemos las palabras mágicas, o sea, “Martínez manda”. Cinco pandilleros no me iban a obligar a humillarme de semejante manera, así que trate de retirar a Martínez de mi camino para llegar hasta los taxis.

            Trate de impactar sobre él con una serie rápida de patadas, pero en vez de eso tuve que encajar un golpe directo a mi mandíbula. Después de eso escuche varios click’s, lo cual me indico que habían sacado sus navajas, había sonado la hora de sacar EL cuchillo. No tarde mucho en estar apuntando con la hoja al cuello de Martínez. Al parecer les impresiono un poco el tamaño de la hoja, porque después de esto Martínez cogió a los suyos y se fueron.

 

            Después de recoger el Porche, lleve a Nick hasta el hotel. Ya eran las nueve de la mañana, habíamos estado la mayor parte de la noche fuera, y me imagine que los demás estarían preocupados.

            Cuando llegamos al hotel pude comprobar que así era, pero por suerte yo me había ido con Nick y se encontraba bien. Estuvimos hablando un rato con el resto del grupo.

            Viendo la hora que era decidí tomar algo de comer, así que pedí un desayuno para mí, y algo para los demás. Nick no parecía estar bien, porque poco a poco se fue apagando, y antes de irse a la habitación a dormir, se me acerco y me pidió disculpas por lo que había hecho esa noche. Me dejo confundido, ahora parecía abatido y como si se estuviese arrepintiendo de como se había comportado. No le di mayor importancia.

            Una vez hube dado buena cuenta del desayuno me dispuse a practicar un poco. El entrenamiento que me dieron fue muy bueno, pero sin practica a uno se le va olvidando. Y si quiero seguir progresando no me queda mas remedio que continuar practicando.

            Hice sitio, retire un par de cosas que me estorbaban y me puse cómodo. Me descalce y me retire la chaqueta de deporte. Un poco de calentamiento y ya estaba listo. Una serie de golpes, otra de patadas. Tenia que practicar el golpe que quise dar al tal Martínez y que no me salió cuando debía. Me concentre y lo conseguí, cuatro patadas en el aire en menos de tres segundos. El problema es que cuando me enfrente con alguien no tendré tiempo para concentrarme, pero bueno, confiemos en que la practica me ayude a hacerme más hábil.

            Al parecer mis movimientos llamaron la atención de los chicos del grupo, pues ahora los tres me observaban. En este momento saque EL cuchillo y di unas cuantas estocadas al aire. Uno de los chicos me lanzo un cojín, y le adivine la intención. De seguro pretendía que yo lo partiese en dos, lo intente, pero no salió bien. Volvió a lanzarme otro, y volví a fallar. Algo no iba bien, puede que todavía no sea lo suficientemente bueno.

            Ellos volvieron a lo suyo. Y yo continúe con lo mío, mientras pensaba en que humor tendría Nick cuando despertase, y de que nuevos problemas tendría que sacarle.

domingo, 25 de enero de 2009

san zahoneo

pues no se que tendrá sigüenza... 
pero casi me da por meterme a monje...
o empezar a escribir una secuela del nombre de la rosa :P :D :D :D :D :D :D



jueves, 22 de enero de 2009

jueves

como todos los días de oficina reviso que todo este en orden. el ordenador apagado, hace ya tiempo que le dejo descansar por las mañanas, ha descargado mucho ya y se merece un respiro. la ventana abierta y la persiana un poco subida, para que el aire entre en la pequeña cueva y renueve los vapores de los sueños dormidos. las luces apagadas, para no derrochar una energía que otros derrocharán.

en el lado izquierdo del abrigo guardo mi disco duro, portador de mis conocimientos, de mi hacer, de mi oficio, guarda de recuerdos, de memorias, de aventuras. y un poco más abajo el móvil, cuya función, aunque sencilla, es importante, pues permite a propios y extraños encontrarme entre las seis mil setecientas cincuenta y cinco millones cuatrocientas cincuenta y dos mil doscientas treintaidos (1) almas que habitan el planeta que nos ha tocado vivir.

a la derecha la cartera, con documentos que me identifican, y, aunque consciente de mi existencia por voluntad propia, me indican que estoy vivo para nuestra sociedad y que me permiten acceder a los servicios que con mis impuestos he pagado. también están representados mis haberes monetarios, papel, metal y plástico, que si bien no son mucho me permiten disfrutar de cuando en cuando, unas veces mucho y otras un poco menos.

el bolsillo inferior derecho queda reservado para el llavero, del cual cuelgan las llaves que me permiten acceder a mi morada en este pequeño terruño, que desafiante emerge como minúsculo punto en el vasto océano.

el clack del interruptor precede a la instantánea penumbra que envuelve con halo de misterio la pequeña estancia. sombras burlonas se despiden de mi, sabiendo que harán falta como unas ocho horas hasta que pueda volver al abrigo de este prestado hogar. cierro la blindada puerta y doy dos vueltas a la llave mientras la mañana me saluda con un escalofrío, son días frescos estos, extraño para el lugar en el que me encuentro.

observo el solitario patio de luces mientras me aproximo a los ascensores. los niños ya no juegan abajo, la desidia y avaricia de unos ha hecho de esta construcción un peligro constante de desprendimiento, ya nadie juega abajo.

salgo del limpio ascensor para acceder al limpio portal del edificio. el portero hace bien su trabajo, todo esta limpio, huele bien, a veces es lo único limpio que veo en el día, y se agradece. la tranquilidad y el silencio comienzan a desvanecerse según me acerco a la última puerta que me separa de la realidad.

la ciudad despierta, se despereza y estira. los coches van y vienen, con personas pensando en sus cosas, quizá haciendo planes para la tarde, quizá deseando que el día termine, quizá queriendo llegar a casa para descansar, van y vienen. los niños esperan la guagua que los llevara al colegio, unos acompañados de sus padres, otros de sus compañeros, los menos en solitario inmersos en su imaginario mundo donde nada ni nadie los molesta.

hoy los semáforos están de buen humor. me regalan su verde sonrisa y me permiten alcanzar la acera idónea para llegar hasta el trabajo. camino despacio, he salido cinco minutos antes de lo normal, quería disfrutar un poco de lo que la mañana tenga para mi.

miro hacia arriba, la gente no lo hace. y nos perdemos muchas cosas. hay balcones adornados, hay estatuas de nubes, hay soles y lunas. la gente mira al suelo, y nuestro entorno tiene mas que al plano en el que andamos. miro hacia arriba y una luna casi desvanecida me saluda con su sonrisa, al mismo tiempo que se despide de mi. me dice que no puede quedarse, el sol ya asoma a mi izquierda, y no puede dejarse atrapar. me sonrío, siempre jugando al ratón y al gato, siempre jugando.

después de unos cuantos meses haciendo el mismo camino ya no tengo que pensar en él. el itinerario esta ya grabado y mis pies se mueven sin que tenga necesidad alguna de concentrarme en ellos, pienso "al trabajo" enciendo el piloto automático y me dejo llevar. aprovecho la travesía para navegar entre mis pensamientos mientras me cruzo con las personas en la calle, me muevo cuando ellos se mueven, me paro cuando ellos se paran, así evito mirar los rojos, naranjas y verdes, para que no me distraigan con su brillante color.

llego a mi destino con la habitual puntualidad que me caracteriza. se que no hay problema si llego un poco más tarde, pero no es un habito que me guste. de hecho uno de mis cometidos es estar presente por si alguien necesita de mi, y no me cuesta ningún trabajo ser puntual, siempre lo he sido, es como respirar, no tengo que concentrarme ni pensar en ello.

hoy mi compañero ya estaba en el despacho. son pocos los días que el llega antes que yo, y como había aventurado, se había caído de la cama. no es normal, pero ocurre de vez en cuando. hemos comenzado a charlar, la típica conversación matutina de buenos días. no se porque, pero hoy me ha apetecido sentarme en su mesa frente a el. nada trascendental, no resolveríamos ningún problema mundial, ni nada de nuestras vidas, pero he disfrutado tranquilamente de los pocos minutos que ha durado nuestra charla.

tras de eso el ritual de inicio de la mañana. enciendo el ordenador, cojo el móvil y la botella vacía de agua y me dirijo a la fuente. esta situada en una zona de recreo para los empleados, dando acceso también a los servicios. es una de estas fuentes con garrafas de veintiún litros, hoy todavía quedaba agua. a veces ocurre que me la encuentro vacía, me molesta un poco, porque el que la ha vaciado no se ha preocupado de reponerla, así que nada, me pongo manos a la obra y la cambio. tampoco pasa nada, se que la garrafa es pesada y hay personas que no pueden con el peso, o que no quieren mancharse el traje.

de vuelta en mi mesa pincho el disco duro y me dispongo a comenzar con la tarea. la lista de cosas pendientes es tan larga que a veces no se cual hacer. mientras la maquina virtual se inicia me decido por donde continuar, a la par que arranco los programas de mensajería que me permiten estar en contacto con los míos de forma instantánea. a veces pienso que es como magia, miles de kilómetros entre unos y otros, y los mensajes llegan casi al instante, en menos de un segundo.

a media mañana salgo a desayunar con otro compañero. es costumbre desde que llegué aquí, busqué a alguien que saliese a mi misma hora, y mientras no sea que él o yo estemos de vacaciones, salimos juntos a tomar el piscolabis. en casa solo tomo un café al levantarme, con lo que pronto se despierta el hambre. podría esperar a la hora de comer, pero es mucho tiempo sin tomar nada. el día que se me pasa el desayuno por alguna razón, me mareo un poco y la cabeza me molesta hasta que puedo comer algo.

al salir a la calle de camino al café de siempre, el sol nos ha saludado con lo mejor de sus rayos. y he vuelto a sonreír al sentir ese calor en mi rostro, la vuelta al trabajo después de comer algo se antojaba muy agradable. y no me equivocaba. tras devorar ávidamente las viandas traídas por el camarero, hemos salido sin demora a disfrutar de la caricia de un sol, que tan esquivo ha sido estos últimos días.

hemos salido un poco más pronto de lo habitual, así que el sol no estaba situado adecuadamente para que sus rayos incidiesen sobre nosotros. no nos ha importado, ya que al percatarnos de tal hecho nos hemos dispuesto a cruzar la calle otra vez, son un par de minutos que nos gusta disfrutar y el trabajo seguirá en el mismo sitio esperándonos. cuan sencillo es tomarse un minuto de respiro saludando al sol, y cuan gratificante resulta.

de vuelta al trabajo. ya solo quedan cuatro horas para volver a casa. me tomo un momento para curiosear en internet, aquí y allá, respiro, y vuelvo a la tarea.  esperando que hoy las nubes no jueguen al escondite con el sol y le dejen un rato asomarse para poder volver a disfrutarlo esta tarde.

poco a poco los minutos van pasando, ya queda poco para salir y disfrutar de la tarde. el fin de semana se observa ya próximo y eso da ánimos para continuar con la tarea, que aun siendo aburrida, es necesaria.

el sol me da las buenas tardes mientras camino de vuelta a casa. hoy no se que voy a comer, de martes a viernes es una sorpresa. acostumbro a comprar algo de comida casera en una tienda justo al lado de casa. podría parecer caro pero si haces las cuentas y miras el tiempo que ahorras, ves que sale económico, además, cocinar para uno no tiene el mayor aliciente.

hoy tenemos garbanzos guisados. entro en casa, me cambio y me pongo ropa cómoda, ahora toca disfrutar de mi pequeño espacio. caliento la comida y me preparo la mesa, nada especial, una cerveza para beber y una ensalada de fruta para postre. mientras cómo, pienso si voy a salir o si voy a quedarme a descansar en casa.

cuando termino de comer recojo un poco y noto como el sopor se adueña de mis extremidades, hoy necesito descansar, dejaremos el paseo para otro día. enciendo el incienso y pongo música para relajar mi cuerpo y mis pensamientos. me recuesto en el sofá y me abandono, respirando profundamente hasta que todo se desvanece y me sumerjo en reparador sueño de manos de Morfeo.

despierto y la noche en el exterior va ganando terreno. ya no es tiempo de paseo, así que recojo la casa un poco haciendo tiempo hasta la hora de la cena. me siento delante del ordenador y escribo, ya queda poco para el final del día.

quizá cene viendo un poco la televisión o charlando con alguien desde el ordenador, ya veremos que sale. lo que supongo sí ocurrirá es que me acostaré a eso de las once, tal como es habitual en los días víspera de trabajo. mañana es viernes, se presenta ante mi todo un fin de semana para disfrutar.
___________________________________________________

miércoles, 21 de enero de 2009

malos momentos

todos los sufrimos, sin excepción alguna

ninguno los quiere, a nadie le gusta el dolor

¿qué sería de nosotros sin ellos?

los necesitamos, es la única forma de darnos cuenta de los buenos momentos. esos momentos que nos gusta disfrutar y que queremos con nosotros cuanto más mejor...

del mismo modo, si solo hubiese buenos momentos todo sería muy aburrido... y lo peor de todo... nuestro miedo desaparecería...

es el miedo lo que nos mantiene despiertos... lo que espolea nuestro ser... es la voluntad de superar el miedo lo que nos hace progresar, continuar, superarnos, alcanzar los buenos momentos...

sin miedo no seríamos más que un perro o un gato o un pájaro o un árbol... criaturas sin voluntad sujetas a sus instintos... sin consciencia de su propia existencia...

para vivir nuestra vida el miedo es necesario pero no suficiente... ser consciente de ello nos permite enfrentarlo con nuestra voluntad y la resolución necesaria para superar el origen de ese miedo... la causa que lo produce...

superada la causa, superamos nuestro miedo
superado el miedo, nos sobreponemos de los malos momentos
sobrepuestos de los malos momentos, nos preparamos para disfrutar los buenos momentos

siempre habrá causas que lo produzcan...
no temáis al miedo, siempre vendrá a nosotros...
estad atentos, enfrentadlo con determinación...
y disfrutad nuestra consciencia de la vida

miércoles, 7 de enero de 2009

llueve

cuando pongo el píe en la calle un cielo cubierto de grises y oscuras nubes se inclina ante mí para saludarme en la fría tarde.

la melodía de la música hace de combustible para el ingenio que permite a mis piernas desplazarme por las humedas calles. la gente comienza a amontonarse en las aceras, hoy es día de celebración, de magía para la ignorancia, de aquellos demasiado jovenes o ingenuos a los cuales la mentira les sigue encandilando. no comparto el entusiasmo, pero lo respeto.

hace poco que descubrí el lugar de mi peregrinación. nunca antes había estado, tuvieron que venir a enseñarmelo desde lejanas tierras. y desde entonces, cuando mi ser lo pide, acudo a meditar a este pequeño reducto, que desgarrando la asfixiante costra de acero y asfalto, se nos muestra en rincón de tranquilidad y color.

a mitad del camino recorrido recibo mi regalo. las gotas de lluvía comienzan a posarse sobre mi cabeza... llueve... y miro hacia las oscuras nubes para que el regalo que estan dejando caer acaricie mi cara. y entonces sonrio... porque se lo que esto significa, hoy en el parque habría menos gente, esta lluvia haría el resto con los pocos visitantes que ignorasen la celebración.

cuando entro en el parque ya pocos eran los que deambulan por él. aunque artificiales, los cursos de agua me saludan con su ronroneo continuo... hoy todos ronronean... llueve... y empiezo a notar como poco a poco la humedad va calando mis ropas... y sonrio.

mis pasos se relajan, ya no hay prisa por llegar a ningun sitio, me abandono a la contamplación de las formas, colores y aromas que ante mis sentidos se presentan... huele a tierra mojada... llego a una de las formaciones circulares y comienzo a dar vueltas a su alrededor... como danzando bajo la lluvía en torno a un antiguo tumulo, con el repiquetear de las gotas en las hojas de palmera... y me siento uno con los elementos, la tierra bajo mis pies, el aire del exterior, el agua en mi ropa y el fuego de mi interior.

y entonces me quedo solo... en mi ir y venir... en mi bajar y subir... ya cuando siento que la lluvia llega a mi piel decido que es el momento de regresar a casa.

hoy he recibido dos de los mejores regalos que podían hacerme, lluvia y un parque para mi solo.

sábado, 3 de enero de 2009

hablando de pastis...

esta mañana trasteando por el internet me he topado con unas canciones que habia escuchado hace mucho tiempo... 


ya el antonio nos daba un anticipo